¿Qué tan seguros son realmente los ascensores modernos?

Los ascensores están llenos de sistemas de seguridad que desconocías. Te contamos por qué son más confiables de lo que pensás, incluso durante un corte de luz.

Subís y bajás todos los días, pero… ¿qué tan seguros son realmente los ascensores?

Los usás sin pensarlo: en el trabajo, en tu edificio, en un shopping, incluso en un hospital. Te metés, apretás un botón y confiás en que esa caja de metal te va a llevar sana y salva a otro piso. Pero alguna vez te preguntaste: ¿qué tan seguros son los ascensores?

Si sos de los que evitan el ascensor porque “te da cosa que se caiga” o, por el contrario, usás uno todos los días sin plantearte nada… este artículo es para vos. Vamos a abrir esa puerta –literal y metafóricamente– y ver qué hay atrás del botón con el número 5.

La tecnología detrás del “ding”

Los ascensores modernos son mucho más que una caja que sube y baja. Están llenos de tecnología de seguridad, sensores y sistemas de respaldo. Y, aunque parezca exagerado, es más probable que sufras un accidente por las escaleras que en un ascensor.

Sistemas de seguridad que ni sabías que existían

  • Frenado de emergencia: Si el ascensor baja o sube más rápido de lo normal, unos frenos especiales lo bloquean automáticamente. No hay forma de que “se caiga libremente”.
  • Interruptores de velocidad y posición: Todo el tiempo están chequeando por dónde va el ascensor, a qué velocidad y si está alineado con el piso. Si algo se sale de lo esperado, se detiene.
  • Puertas inteligentes: No solo se abren y cierran. Detectan si hay algo en el paso, como una mochila o un pie, y detienen su cierre si es necesario.
  • Cables múltiples: La mayoría de los ascensores tiene entre cuatro y ocho cables de acero. Cada uno puede soportar el peso completo de la cabina. O sea, el ascensor podría estar sostenido por uno solo y no pasaría nada.

Además, buena parte de los ascensores modernos tiene sistemas de comunicación directa con un centro de control, por si quedás atrapado. Así que sí, también podés respirar tranquilo/a ahí.

¿Y si se corta la luz? ¿Quedás a oscuras y colgando?

Es una de las dudas más comunes. Y la respuesta corta es: no, no vas a caer como en una película de acción.

Cuando se corta la electricidad, la mayoría de los ascensores modernos tiene un sistema de respaldo con baterías o generadores. Esto sirve para dos cosas:

  1. Llevarte al piso más cercano si estabas en movimiento
  2. Mantener encendida la luz de emergencia dentro de la cabina

Además, el mecanismo de frenado actúa de forma mecánica, no depende de la electricidad. Así que no hay forma de que el ascensor se convierta en una guillotina vertical. Lo que sí puede pasar es que se detenga y tengas que esperar a que te rescaten. Molesto, sí. Peligroso, no.

De hecho, según la Organización Internacional de Normalización (ISO), los ascensores son responsables de menos del 0.0001% de los accidentes en edificios. Y la mayoría de esos accidentes ni siquiera se debe a fallos técnicos, sino a mal uso (como meter un carrito de supermercado atascándolo en la puerta, o sobrecargar la cabina).

¿Y qué pasa con los ascensores viejos?

Acá la cosa puede ponerse interesante. No todos los ascensores son modernos y tecnológicos. En muchos edificios antiguos siguen funcionando modelos que tienen más años que tu fotocopiadora del secundario.

¿Son seguros? En general, sí. Porque incluso los modelos antiguos están obligados por ley a cumplir con inspecciones regulares y mantenimiento periódico.

¿Cada cuánto se revisan?

Depende del país y la ciudad. Por ejemplo:

  • En Buenos Aires, la ley exige una revisión técnica integral cada 12 meses, y un control trimestral de mantenimiento.
  • En España, los ascensores se revisan cada 4 a 6 semanas, según la carga del equipo.
  • En Estados Unidos, la mayoría de las jurisdicciones exige inspecciones anuales obligatorias, más chequeos mensuales del operador de mantenimiento.

Así que si el ascensor está al día con sus controles, puede tener 50 años y seguir siendo seguro. Es más, el clásico ascensor con rejas y puertas de hierro que encontrás en edificios antiguos a veces tiene más estructura y materiales robustos que los modernos.

Algunas rarezas y récords que te van a gustar

Ya que estamos, y porque lo prometimos como un artículo curioso, también hay ascensores que llevan la seguridad a un nivel casi futurista.

Por ejemplo:

  • El edificio Burj Khalifa (Dubái), el más alto del mundo, tiene ascensores con cabinas presurizadas para evitar molestias por el cambio de altitud.
  • En Japón, hay ascensores diseñados para funcionar durante terremotos, con sensores que detectan vibraciones antes de que vos las sientas. Te bajan y se detienen automáticamente.
  • Algunos ascensores de vidrio en hoteles de lujo tienen sistemas de evacuación lateral en caso de emergencia, similares a los de un avión.

Y si te preocupa quedarte encerrado, sabé que la media global de personas rescatadas de ascensores sin consecuencias graves es del 99,99%. Lo máximo que suele pasar es que llegues tarde a una reunión o tengas unos minutos para pensar en tu existencia en una caja de acero.

Podés seguir desconfiando un poco del ascensor si te hace sentir mejor… pero por puro instinto, porque la tecnología, el mantenimiento y las estadísticas te respaldan. En el próximo viaje al piso 7, quizás puedas relajarte un poco más, sabiendo que la caja en la que estás tiene más sistemas de seguridad que un auto moderno. Y que, en el fondo, estamos más seguros subiendo que caminando. Literalmente.