¿Compraste “bitcoin” en BSC? Entonces, ¿qué tenés realmente?
Si alguna vez usaste PancakeSwap o alguna wallet como Trust Wallet o Metamask con la red Binance Smart Chain (BSC), puede que hayas comprado algo llamado “BTCB” o algún token similar que decía representar bitcoin. Pero… ¿eso es bitcoin de verdad? Spoiler: no. Pero sí. O sea, más o menos. Vamos paso por paso.
¿Qué es BTCB y por qué aparece como “bitcoin” en BSC?
La red BSC no es la red de bitcoin. Es una blockchain paralela, compatible con Ethereum, creada por Binance para transacciones rápidas y baratas. Como allí no podés enviar directamente bitcoins (BTC), hay versiones envueltas o wrapped que se usan como “representación” del bitcoin original.
El más conocido de estos tokens es BTCB, un activo BEP-20 que Binance creó como una copia del BTC 1:1. Funciona así:
- Binance “reserva” bitcoins reales en una wallet que cualquiera puede verificar.
- Emite la misma cantidad de BTCB en la red BSC.
- Te permite tradear, holdear o usar esos BTCB como si fueran BTC, pero solo dentro del universo BSC.
En otras palabras, si comprás “bitcoin” en PancakeSwap usando BSC, lo más probable es que estés recibiendo BTCB. No es el bitcoin original, sino una copia que representa su valor.
¿Entonces BTCB vale lo mismo que un bitcoin real?
En teoría, sí. El precio de BTCB está ligado al de bitcoin real porque se supone que cada BTCB está respaldado por un BTC en una wallet auditada (podés verla acá).
Peeero… eso no significa que puedas hacer con BTCB lo mismo que con un BTC real. Estas son algunas diferencias importantes:
- BTC se usa en su propia red, con sus propias reglas, miners y fees.
- BTCB funciona en la red de Binance Smart Chain, totalmente distinta.
- No podés pagar cosas con BTCB donde aceptan BTC, a menos que lo conviertas.
- Si Binance desaparece o la red BSC tiene problemas, tus BTCB pueden volverse papel pintado digital.
Así que aunque el precio sea el mismo, el poder que tenés sobre esos activos no lo es. Con BTC tenés soberanía sobre tu cripto. Con BTCB, estás confiando en Binance.
¿Y cómo saber qué estás comprando realmente?
Una trampa frecuente es que muchas wallet o exchanges “ocultan” la red que estás usando. Te muestran simplemente “bitcoin”, pero cuando mirás los detalles, te das cuenta de que lo tenés como token BEP-20 (BSC) o incluso como token ERC-20.
Esto es clave: bitcoin solo es bitcoin en su red
Si lo tenés en la red Bitcoin (sí, la original), entonces sí: tenés bitcoin real. Si lo tenés como BEP-20, ERC-20 o cualquier otro formato, tenés una versión representada. Puede ser útil, rápida, más barata… pero no es un BTC puro.
¿Cómo revisarlo? Fácil:
- Ingresá a tu wallet y mirá los detalles del token.
- Si dice “BEP-20”, estás en la red Binance Smart Chain.
- Si dice “Bitcoin network”, ahí sí, es BTC nativo.
En Metamask, por ejemplo, no podés tener BTC real, solo versiones.
¿Y qué pasa si querés pasar de BTCB a BTC?
Se puede. Generalmente, lo hacés así:
- Mandás BTCB a Binance.
- Lo convertís o retirá como BTC en red Bitcoin.
El detalle es que estás confiando 100 % en Binance y sus procesos. Si Binance decide bloquearte la cuenta o hay una restricción, no podés convertir nada. Tu BTCB se queda en el limbo.
Entonces… ¿vale la pena comprar “bitcoin” en BSC?
Depende de lo que quieras hacer. Si tu objetivo es:
- Tradear rápido y barato: tiene sentido usar BTCB en BSC, es práctico y eficiente.
- Usar BTC en contratos inteligentes de DeFi: también sirve, porque el BTC real no puede usarse en esas apps.
- Holdear a largo plazo como reserva de valor: acá sí, mejor tener BTC real. No dependés de terceros.
- Enviar pagos o cobrar en BTC verdadero: BTCB no te sirve, tiene menos aceptación fuera del ecosistema BSC.
Una buena analogía: BTCB es como un cheque al portador con respaldo en bitcoin. Su valor depende de que quien lo emitió (Binance) siga cumpliendo su promesa de respaldo.
Si sos de los que creen en la descentralización y la soberanía de las finanzas, vas a preferir el BTC auténtico. En cambio, si te interesa la comodidad antes que la filosofía, el BTCB en BSC puede ser más práctico para tu día a día.
Al final, lo importante es saber lo que tenés. Muchos entran al mundo cripto comprando “bitcoin” sin saber en qué red están ni qué están comprando. Y ahí es donde todo se pone confuso (por no decir peligroso). Así que la próxima vez que alguien te diga “compré bitcoin en Metamask”, ya sabés: probablemente no.
Tal vez, después de todo, tener bitcoin no es tan simple como darle a “comprar” y listo. Pero entender esa diferencia puede ser la línea entre ser el dueño de tu cripto… o solo tener una copia prestada.